¿Sabes cuál es el momento adecuado para desechar tus zapatillas de pádel y adquirir unas nuevas? ¿Conoces los mejores consejos para cuidar, mantener y limpiar zapatillas de pádel? Las zapatillas pádel baratas son un complemento que siempre tienen que mantenerse limpias y en buen estado. No te despegues de la pantalla para conocer todo sobre el mantenimiento del calzado de pádel.

Limpiar zapatillas de pádel: actividad obligatoria para el jugador

El calzado de pádel es probablemente el elemento más importante en el pádel después de las palas. Y es por eso que deben de estar siempre en las mejores condiciones. En esta publicación, nos enfocaremos en hablar sobre los cuidados que se le deben de dar a unas zapatillas, pero tenemos que hacer énfasis también en la elección de las zapatillas.

Como ya hemos mencionado, elegir las zapatillas de pádel adecuadas no es suficiente, también debemos de cuidarlas y mantenerlas en buen estado. Para ello, tenemos algunos consejos muy buenos que serán de gran ayuda.

Cómo cuidar, mantener y limpiar las zapatillas de pádel

Antes de hablar sobre el proceso de limpieza de unas zapatillas de pádel, es importante mencionar la prevención. Cuidarlas y evitar que se ensucien también es nuestra responsabilidad, aunque claro, es imposible mantenerlas impecables todo el tiempo. Sin embargo, podemos llevar a cabo acciones de cuidado básicas como evitar derramar alguna sustancia sobre ellas, utilizarlas únicamente para jugar al pádel, jugar en superficies que no dañen las zapatillas y evitar el contacto con paredes y superficies que puedan dañarlas.

Pero cuando el desgaste o la suciedad ya es evidente, es momento de entrar en acción y limpiarlas. Antes de comenzar la limpieza, también es importante retirar las plantillas y los cordones, de esta forma se podrá realizar una limpieza más profunda y sin dañar algún componente del calzado.  Lo primero que se recomienda, es realizar una limpieza externa, para remover polvo y cualquier otra sustancia superficial. Para ello, se puede utilizar un paño seco o semi-húmedo, o un cepillo.

Ya que el exterior ha sido limpiado, podemos pasar a una limpieza profunda más completa. Si piensas hacerlo en una lavadora, es importante llevar ciertos cuidados como: elegir una potencia de lavado baja para evitar los impactos, utilizar solo agua fría y no centrifugar. Es importante evitar a toda costa los movimientos rápidos que puedan dañar a las zapatillas.

Si quieres que tus zapatillas de pádel sufran el menor maltrato posible, puede optar por lavarlas únicamente remojándolas dentro de una cubeta con agua y detergente, lavándolas a mano. De esta forma, evitarás que las zapatillas puedan sufrir daños dentro de una lavadora.

¿Cuándo debemos de cambiar de zapatillas?

Esta es una de las preguntas más comunes entre los jugadores, y hay algunas señales que nos indican que ya es momento de adquirir unas zapatillas nuevas. Es importante identificar el nivel de desgaste de las zapatillas y si afectan en el rendimiento.

Cuando las zapatillas únicamente presentan daños superficiales como decoloración, manchas o polvo, no es necesario cambiarlas. Pero si vemos daños a nivel estructura como fisuras en la malla, la piel sintética o la lengüeta roturas en el caucho de la suela, o desprendimiento de componentes, es cuando debemos de preocuparnos.

Pero existe un motivo aún más importante que requiere un cambio de zapatillas, la amortiguación. Todas las espumas amortiguadoras de las zapatillas se desgastan por la cantidad consecutiva de impactos que sufren. La mediasuela de una zapatilla alcanza un nivel de desgaste que le impide seguir brindando sus beneficios. Esto puede aumentar la posibilidad de sufrir incomodidades e incluso lesiones en las articulaciones, ya que no hay ninguna base que amortigüe las fuertes pisadas.

Consejo para secar las zapatillas después de lavarlas

Esta es una parte muy importante de la limpieza y que, de ser realizada de forma incorrecta, podría dañar las zapatillas de manera permanente. Nunca seques una zapatilla con calor, ni en secadora, ni con una plancha o con exposición al sol. Las altas temperaturas podrían deformas las zapatillas y arruinar sus componentes.

Lo más aconsejable es secar la superficie con papel o con algún paño seco, y posteriormente dejarlas para que se sequen pero en interiores o en zonas con sombra. De esta forma, no se dañan los materiales.